Distanciamiento social: una oportunidad para los impresores y señalizadores

Graeme Richardson-Locke analiza la nueva era del distanciamiento social y las oportunidades que presenta para los impresores y señalizadores.

En unos pocos meses, la pandemia del COVID-19 no sólo ha interrumpido temporalmente la forma en que trabajamos, sino que ha obligado a innumerables empresas a analizar, detenidamente, sus negocios y repensar los espacios de trabajo y los modelos operativos.
 
En un momento de profunda interrupción, las empresas de impresión deben estar preparadas para reinventar sus propuestas para desarrollar nuevas fuentes de ingresos y atraer nuevos clientes. Para muchos productores de gráficos, un significativos volumen de impresiones pueden haber dependido de conciertos, espectáculos y otros eventos en el futuro, así como de activos negocios en los sectores de turismo, hotelería y recreación. El cierre del comercio minorista no esencial también ha reducido el flujo de pedidos de gráficos promocionales.
 
Sin embargo, la nueva era de distanciamiento social presenta una oportunidad única para que los impresores y los fabricantes de letreros suplan las necesidades de los clientes con productos y propuestas nuevas y creativas, mientras que el fuerte aumento de la demanda de productos específicos para COVID-19 significa que se requiere a los impresores para proporcionar una diversidad gama de soluciones.
 
Más recientemente, los gráficos para piso, las señales para pavimento, cubiertas de pilares, así como también pancartas de interiores y exteriores se emplean activamente para mantener las medidas de distanciamiento social y garantizar un entorno seguro tanto para el personal como para los clientes.
 
Con oficinas, tiendas minoristas y espacios públicos programados para reabrir a partir de ahora y en los meses de verano, dependiendo de las protocolos específicos de cada país, la demanda de estos productos será más alta que nunca, y, por ende, los tiempos de respuesta serán mucho más cortos.
 
Un área de negocios que podría beneficiarse de los gráficos impresos es la industria de servicios de alimentos. Dado que los restaurantes enfrentan el cierre o la reapertura restringida, por el momento, en muchos países. Muchos propietarios de negocios de hotelería están cambiando a modelos de entrega de alimentos o cambiando a otros servicios. Esto estimula la demanda de carteles y pancartas que promocionen los servicios de comida para llevar, o la señalización al aire libre con códigos QR que facilitan los pedidos afuera de un restaurante.
 
Las medidas de distanciamiento social también se incorporarán ampliamente en los espacios de oficina y otros entornos de trabajo, donde habrá un requisito para una evaluación física y señalamiento de zonas de seguridad. La actualización de la señalización de salud y seguridad contará con un lugar más destacado, pero también hay más oportunidades creativas para los letreros, por ejemplo, ofreciendo separadores impresos, flexibles y estéticamente atractivos, para usar como divisores de habitaciones.
 
Pero quizás la mayor oportunidad radica en la recuperación del sector minorista. Después de meses de interacción social reducida, predominantemente, al aire libre y una dependencia forzada de las compras en línea, muchos consumidores dudarán en regresar a los espacios físicos de venta minorista.
 
Por supuesto, a medida que las tiendas vuelvan a abrir, los propietarios de tiendas deberán emplear la señalización y los gráficos de piso, ahora obligatorios, para coordinar a los clientes en un intento por minimizar el contacto cercano.
 
Pero, pensando más positivamente, también querrán que sus espacios comerciales sean visualmente atractivos, para atraer clientes a sus tiendas y suavizar el impacto emocional negativo de tantas restricciones y prohibiciones. Esto se puede lograr con gráficos de alto impacto en pisos, paredes y superficies de ventanas y quizás revitalizando interiores con una decoración llamativa.
 
Entonces, si bien numerosas empresas de impresión han sido sacudidas por la fuerza disruptiva de la pandemia y sus consecuencias económicas, la recuperación de negocios en todos los sectores ofrece oportunidades positivas para los fabricantes de letreros y proveedores de servicios de impresión que pueden aprovechar el rol creativo que puede desempeñar la impresión en la mejora de experiencias cotidianas a medida que nos adaptamos.
 
Al igual que muchas otras industrias, en este momento, las imprentas especializadas enfrentan algunos obstáculos por delante, pero eso no significa que no podrán superarlas. Sí, la interrupción es una experiencia debilitante para un negocio, especialmente cuando es involuntario. Pero las empresas que tienen la confianza suficiente para adaptar y diversificar su oferta e idear productos y soluciones orientadas a las necesidades cambiantes de los clientes son las que probablemente capitalicen una recuperación comercial más amplia y, en última instancia, obtengan los mayores beneficios cuando la demanda regrese.