Joanne O’Rourke, ganadora del Premio Epson de Diseño, habla de la interfaz entre narración, naturaleza, artesanía e innovación en su empresa, y de cómo la Experiencia de Personalización 2025 fue un momento decisivo en su carrera.

La sostenibilidad no es una limitación, sino un motor de innovación. En la Conferencia SmartHub de este año, celebrada en la Personalisation Experience 2025 de Berlín hace unas semanas, tuve el honor de compartir mi trayectoria como diseñadora textil y de bellas artes que trabaja en la intersección de la naturaleza, la artesanía y la innovación.

La experiencia fue aún más especial al ganar el Premio Epson de Diseño, un gran hito en mi carrera y un recordatorio de la importancia de contar historias en el diseño sostenible.

Soy la fundadora de Finch Marsh, una marca arraigada en la responsabilidad medioambiental y la conexión emocional. Mi proceso creativo tiende un puente entre lo artesanal y lo digital, transformando las algas marinas y los tintes naturales en un diseño contemporáneo de superficies.

Un viaje de diseño anclado en la naturaleza

Mi viaje comenzó en la Universidad de las Artes de Norwich, donde estudié una licenciatura en diseño textil. Durante esos tres años, me centré tanto en las técnicas digitales como en las artesanales, culminando con una exposición en New Designers. A partir de ahí, me seleccionaron para unirme a Green Grads UK, lo que me dio la oportunidad de exponer en Londres y Manchester y, en última instancia, me llevó a FESPA.

El corazón de mi práctica lo forma el mundo natural, no sólo como inspiración, sino como colaborador activo. Mis materiales suelen incluir telas de desecho, tintes a base de algas y algas prensadas, creando piezas de texturas profundas con un impacto medioambiental mínimo.

Utilizo el mar y sus materiales como tema y como herramienta. Cada pieza es una colaboración silenciosa con la naturaleza, y cada impresión lleva esa historia adelante.

Valores fundamentales de la marca

En Finch Marsh, mi trabajo se basa en cinco pilares de marca:

  1. Hecho a mano por la naturaleza: con imperfecciones naturales y estética orgánica
  2. Diseño emocional lento: hacer obras que conecten y perduren
  3. Materiales regenerativos: abastecimiento consciente y reducción de residuos
  4. Narración con raíces oceánicas: dejar que el mar modele mi proceso y mi mensaje
  5. Patrimonio moderno: mezcla de prácticas antiguas con relevancia contemporánea

No son sólo valores; son decisiones a las que vuelvo en cada diseño. Tanto si pinto con tintes ecológicos como si refino escaneados en Photoshop, esos cinco principios me hacen responsable.

Una fusión de artesanía y tecnología

En mi presentación, hablé al público sobre cómo combino el teñido a mano y las técnicas digitales para favorecer la personalización y la producción sostenible.

Empiezo pintando con tintes naturales sobre tela, a menudo en composiciones a gran escala. Después, con un escáner plano, digitalizo estas obras, las edito delicadamente en Photoshop y las preparo para la impresión digital bajo demanda.

Quiero que cada pieza conserve la intimidad de algo hecho a mano, aunque se reproduzca a escala.

Este enfoque no sólo reduce los residuos, sino que permite la personalización sin comprometer la integridad artística. Crea productos que se sienten emocional y materialmente ricos.

Más allá de la decoración: el diseño como historia

Para mí, el diseño no es sólo superficial. Es un vehículo de conexión entre el diseñador y el usuario, entre la naturaleza y la tecnología.

Creo que hoy en día la gente está hambrienta de significado. Quieren que sus interiores, su moda, sus objetos reflejen valores. Y ahí es donde el diseño puede conducir.

En FESPA, hablé de cómo la narración está integrada en cada paso de mi proceso, desde la búsqueda de algas hasta el archivo digital final. Se trata de crear objetos que se sientan vivos, que resuenen y que duren.

Materiales y métodos

Mi proceso es de bajo impacto y gran emoción. Utilizando índigo, resinas de algas marinas y antiguas técnicas de teñido, creo piezas que son a la vez ecológicas y visualmente atractivas. En mi proceso utilizo algas prensadas y pigmentos derivados de las algas. Las algas actúan como resistentes naturales y crean bellas impresiones orgánicas cuando se superponen con tintes a base de índigo y algas. Estos pigmentos naturales son a base de agua y de bajo impacto, lo que confiere a la obra una sólida base medioambiental. Es una forma de incrustar el ritmo de la costa directamente en la obra, tanto en la forma como en el significado. La naturaleza no es sólo mi inspiración, es mi codiseñadora.

Trabajo con un mínimo de agua, evito los productos químicos nocivos y busco técnicas que hayan perdurado durante siglos. Mi trabajo es lento, reflexivo y está diseñado para formar parte de un futuro más sostenible.

De cara al futuro

Ser reconocido por Epson UK con el Epson Design Award fue un momento de enorme gratitud y estímulo.

Ganar el Premio Epson fue como cerrar el círculo: la validación de haber unido el proceso natural con el potencial digital. Es un honor, y me hace estar aún más ilusionada con lo que está por venir.

El apoyo de Epson a los talentos emergentes y al diseño sostenible es un paso significativo para hacer avanzar nuestra industria. Estoy profundamente agradecido a los jueces y al equipo de FESPA por dar cabida a voces como la mía.

Esta charla fue sólo el principio. Continuaré la conversación en Ocean Talks con Boat International, donde expondré mi trabajo para el mercado de interiores y yates de lujo, un nuevo escenario para el diseño sostenible de superficies.

Mi práctica seguirá basándose en la naturaleza, impulsada por la personalización y comprometida con la fabricación ética.

Cuestionario: Repensar el impacto textil

Al final de mi sesión, compartí un breve cuestionario para ayudar a replantear la urgencia de la sostenibilidad en nuestra industria. He aquí una instantánea para que la tengan en cuenta los lectores del Club FESPA:

  1. ¿Cuántas toneladas de productos textiles se tiran cada año en los vertederos de todo el mundo?
    Más de 92 millones de toneladas, es decir, un camión de la basura cada segundo.
  2. ¿Cuánta agua se necesita para hacer una camiseta de algodón?
    Unos 2.700 litros: lo que bebe una persona en 2,5 años.
  3. ¿Qué cantidad de los vertederos del Reino Unido procede sólo de la ropa?
    Más de 350.000 toneladas anuales.
  4. ¿Cuánto stock de moda queda sin vender cada año?
    Alrededor del 30%: casi una de cada tres prendas.
  5. ¿Cuánto tarda en descomponerse el poliéster?
    Hasta 200 años.

Estas cifras no son sólo hechos: son una llamada a la acción.

Palabras finales

FESPA fue una oportunidad que definió mi carrera, no sólo para compartir mi trabajo, sino para conectar con otros creativos, marcas y pensadores que se preocupan por nuestro futuro.

Creo que el diseño puede ser a la vez sostenible y bello. No tenemos que elegir. Sólo tenemos que preocuparnos lo suficiente como para intentarlo.

A la próxima generación de diseñadores y estudiantes: vuestra voz importa. Seguid experimentando, mantened la curiosidad y dejad que la naturaleza forme parte de vuestro proceso. No sólo sois el futuro de esta industria: ya le estáis dando forma.

Si quieres seguir mi viaje o colaborar, encuéntrame aquí @finch_marsh en Instagram – siempre estoy abierto a conversaciones. Sigamos diseñando un futuro mejor, juntos.