Desde hace algún tiempo, la impresión directa sobre prenda se encuentra en un estado de cambio: un cambio en la digitalización y un cambio en la flexibilidad. Folker Stachetzki, Director de Marketing de Brother At Your Side, nos explica cómo está cambiando el sector de la impresión textil.

Desde hace algún tiempo, la impresión directa sobre prenda se encuentra en un estado de cambio: un cambio en la digitalización y un cambio en la flexibilidad.

En el mundo actual, muchas cosas suceden online y de forma automática, y estos aspectos también son cada vez más perceptibles en el negocio de la impresión directa sobre prenda. Las máquinas se están integrando en el mundo digital. Con la ayuda de varias soluciones de software y aplicaciones, el funcionamiento de las impresoras y los flujos de trabajo diarios son cada vez más sencillos para los usuarios. Muchas soluciones de software combinan la gestión de productos y pedidos con la conexión a herramientas de comercio electrónico.

Al mismo tiempo, los usuarios pueden evaluar y optimizar la eficacia de su centro de producción mediante funciones de análisis. Se pueden evaluar y supervisar varios centros de producción e impresoras de forma conjunta o individual. También es posible la evaluación de periodos de tiempo específicos. Con estos ratios, las producciones pueden hacerse más eficientes y optimizarse.

Otro aspecto importante en la transformación de la impresión directa sobre prenda es producir en consonancia con la oferta y la demanda. La impresión sostenible bajo demanda proporciona flexibilidad en la producción y las cantidades de los pedidos. En lugar de producir colecciones masivas, es más rentable responder individualmente al mercado, reaccionar más rápidamente a las tendencias y producir sólo lo que se solicita. La impresión bajo demanda abre la posibilidad de reaccionar individualmente a los clientes, tanto a los de grandes producciones como a los de pequeñas cantidades. No sólo tiene en cuenta los deseos de los clientes, sino también el impacto sobre el medio ambiente.

La impresión bajo demanda evita que las prendas se impriman para nada y se desechen sin ser utilizadas. Esto supone costes para el productor porque consume recursos materiales y de producción. También tiene un impacto negativo en el medio ambiente, ya que la energía de producción se gasta sin uso y el textil se desperdicia. Con la impresión bajo demanda, la sobreproducción de prendas puede reducirse drásticamente porque sólo se produce lo que se necesita. Esto ahorra costes, así como emisiones de gases de efecto invernadero en las operaciones de producción. Ya no es necesario destruir las sobreproducciones.

En el sector del comercio electrónico en particular, se crearon varios centros de cumplimiento nuevos como resultado del negocio bajo demanda. De este modo, las mercancías pueden producirse muy cerca de su destino con la ayuda de la tecnología y las asociaciones. Esto conlleva una reducción drástica de los residuos, las emisiones, los plazos de entrega y los costes. Los fabricantes tienen la oportunidad de producir sus mercancías donde están sus clientes. Esto no sólo acorta los plazos de entrega a los clientes, sino que también hace que las ventas sean más fiables.

Las producciones de impresión directa sobre prenda son cada vez más flexibles y se adaptan mejor a sus clientes. Se están eliminando las cantidades mínimas de pedido y las producciones pueden responder a los deseos de sus clientes, desde tiradas muy pequeñas hasta producciones en serie.

Además, las posibilidades de aplicación sobre qué tipo de textil y prendas se puede imprimir son cada vez mayores.

Una parte no desdeñable es la solución DTF, es decir, directo a película. Imprimir sobre película y luego transferirla a las prendas da a las producciones una enorme versatilidad. Con las impresoras textiles de los principales fabricantes, todo impresor DTG puede aplicar también el proceso DTF. Sólo se necesitan unas pocas medidas para ampliar la propia cartera en el área DTF. Las impresiones DTF pueden aplicarse a una amplia gama de materiales, como poliéster, algodón, cuero, imitación de cuero, madera, vaqueros y nailon. Otra gran ventaja del proceso DTF es que las impresiones pueden prepararse y almacenarse. Si es necesario, sólo hay que termoimprimir el motivo sobre el tejido en una fase posterior.

La solución DTF también está en proceso de cambio. Después de que primero se fijaran hojas sueltas a la plancha de impresión de la impresora textil, ahora existe la solución de rollo a rollo.
Ambos procesos DTF ofrecen a los productores ventajas y flexibilidad individuales. La impresión en hojas sueltas es ideal para piezas únicas o cuando hay que probar un motivo o diseño, para cantidades más pequeñas o para tiendas con espacio limitado. La solución de rollo a rollo es óptima para tiradas largas, ya que un motivo puede imprimirse tantas veces como sea necesario y el trabajo de impresión se ejecuta sin necesidad de que un operario supervise la máquina o cambie las hojas de impresión. La solución de rollo a rollo se ejecuta automáticamente y combina muchos pasos individuales que haría un operario.

La flexibilidad que han aportado los cambios en la impresión textil directa hace aún más importante que los productores puedan confiar en sus máquinas. La sostenibilidad y durabilidad de las impresoras textiles directas garantizan una producción fiable.

Especialmente en el ámbito del negocio online, es esencial que no se averíe ninguna máquina para cumplir los plazos de entrega y satisfacer las expectativas de los clientes. Con impresoras de larga duración, el flujo de trabajo se desarrolla sin problemas y con fluidez, y aumenta la eficacia. Cuando las máquinas duran poco, los productores se enfrentan a una pérdida de producción y pueden tener que pagar gastos de reparación o incluso sustituir las impresoras por completo. Por tanto, también son aconsejables máquinas de alta calidad y un buen servicio por parte del fabricante. Si algo no funciona en la máquina, el servicio y la asistencia del fabricante pueden evitar una avería a largo plazo y ayudar. Estas máquinas también garantizan una calidad de impresión constante y fiable.

Los fabricantes también deben tener en cuenta el factor medioambiental en sus producciones y recurrir a soluciones sostenibles. Con diversas normativas para una mayor sostenibilidad, tiene sentido centrarse en procesos ecológicos en una fase temprana. Las tintas a base de agua y las máquinas duraderas que tienen un mínimo de piezas consumibles integradas son los primeros pasos en esta dirección. Muchas tintas contienen productos químicos basados, por ejemplo, en PVC, que no sólo es tóxico, sino también muy perjudicial para el medio ambiente. En las tintas al agua, el agua es el disolvente básico asociado a la tinta. En el proceso de secado, el agua se evapora y los pigmentos de color permanecen en las fibras textiles. Este proceso es seguro para el operador y para el medio ambiente.

En estos aspectos, la industria de la impresión directa sobre prenda se encuentra en un estado de cambio constante y sigue siendo emocionante ver cómo seguirá desarrollándose el negocio y cómo surgirán nuevas innovaciones.