Decorar objetos pequeños es una forma barata de añadir valor a todo tipo de sustratos y productos.

Muchas imprentas se enfrentan a condiciones comerciales difíciles, ya que los clientes intentan reducir sus gastos para hacer frente a los vientos económicos dominantes. Por eso, para muchas empresas de impresión es lógico diversificar su cartera y atraer a una gama más amplia de clientes. Una forma de hacerlo es invertir en máquinas de pequeño formato para decorar objetos pequeños, como sombreros, fundas de smartphone, etc. La clave está en añadir valor facturable a un coste relativamente bajo.

Por supuesto, una forma obvia de hacerlo es mediante la impresión directa sobre película (DtF). La reciente FESPA Global Print Expo de Berlín puso de relieve una variación del enfoque DtF más habitual, denominada DtF UV, que utiliza tinta de curado UV en lugar de tinta al agua. Aplica un principio similar, pero está pensado para objetos rígidos. Es una forma muy rentable de producir pequeños objetos decorados, como azulejos o posavasos.

En el proceso se utilizan dos rollos distintos de película transparente. Una tiene una capa adhesiva encima, y la tinta se coloca directamente sobre ella. Tras la impresión, la segunda película, que es esencialmente una capa laminada, se presiona sobre ella, utilizando únicamente presión. Esto permite manipular el gráfico y, por ejemplo, enviarlo por correo a un cliente. Para aplicar el gráfico, despegas la capa superior para exponer el adhesivo, presionas el gráfico contra el objeto que quieres decorar y luego simplemente lo frotas para forzar la transferencia de la tinta del gráfico. No hace falta calor, aunque algunas superficies pueden requerir una imprimación.

La SureColor G6000 de Epson es una impresora DtF específica ©Nessan Cleary

Mimaki demostró este enfoque en su nueva impresora UV DtF, la UJV300 DtF 75. Imprime CMYK más dos canales de blanco y dos canales de tinta transparente. Admite rollos de hasta 650 mm de ancho, pero con una anchura máxima de impresión de 640 mm. Mimaki ofrece la posibilidad de elegir entre distintas películas en función de la aplicación prevista, como tazas, y el proceso se puede meter en el lavavajillas.

RS Pro llevó este principio un paso más allá. Su impresora Ultimate UV DtF viene con CMYK más blanco y barniz, pero con la opción de una segunda tinta transparente para captar las láminas metálicas, lo que mejora mucho los gráficos…

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